Manteca de karité: propiedades y beneficios para el cabello

Publicado el 20 de diciembre del 2024
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La manteca de karité cuenta con propiedades muy apreciadas en cosmética capilar como su acción antioxidante, nutritiva, antiinflamatoria y calmante.

Esto se debe a una composición rica en ácidos grasos y vitaminas que ayudan a combatir los efectos de los radicales libres, y a prevenir el envejecimiento prematuro del cabello, incluso en cueros cabelludos sensibles o reactivos.

Queremos que conozcas la manteca de karité en profundidad porque es un ingrediente estratégico para el cuidado de tu pelo. Por ello, te hemos preparado este artículo en el que vamos a tratar sus propiedades, beneficios y usos en detalle.

¿Qué es la manteca de karité?

La manteca de karité es una grasa vegetal que se obtiene de la nuez del árbol de karité que crece silvestre principalmente en el África Central. Se utiliza como tratamiento natural para fortalecer, nutrir y proteger la piel, el cabello y las uñas.

En la cocina tradicional africana se consume por su alto valor nutritivo, y se usa como producto cosmético en el cuidado de la piel por sus efectos hidratantes, emolientes y calmantes.

Su gran auge en cosmética se debe a una composición rica en vitaminas, minerales y ácidos grasos, siempre que se trate de manteca de karité sin refinar para garantizar que conserva todas sus propiedades.

Manteca de karité: propiedades para el pelo

Las propiedades de la manteca de karité para la piel son quizá más conocidas que las que puede aportar al cabello. Sin embargo, se trata de un producto lleno de bondades que te va a permitir disfrutar de una melena saludable y llena de vida.

Destacamos a continuación las más relevantes.

Hidratante

El karité contiene ácidos grasos, principalmente esteárico, oleico, linoleico y palmítico, que hacen de ella un cóctel hidratante y nutritivo intenso para la piel y el cabello.

Las ceramidas presentes en su composición evitan la deshidratación de los tejidos garantizando el efecto barrera de la piel.

Emoliente

El karité es un emoliente natural que suaviza el cabello y aumenta su brillo gracias a que sus ácidos grasos se integran bien con los lípidos naturales del cuero cabelludo.

Su acción restaura la flexibilidad de los cabellos dañados evitando su rotura.

Antiinflamatorio

El efecto antiinflamatorio del ácido cinámico del karité, entre otros componentes, ayuda a que el cabello se recupere antes de las agresiones que pueda sufrir.

Por su parte, sus compuestos fenólicos favorecen la reducción de las citoquinas inflamatorias, mitigando este tipo de procesos reactivos.

Regenerante

La vitamina A de este fruto africano, además de un poderoso antioxidante que previene el envejecimiento del cabello, estimula su crecimiento y participa en la regeneración de los tejidos.

Por su parte, la vitamina F que contiene proporciona una acción relipidizante que refuerza el efecto de barrera física y térmica del cuero cabelludo.

Antioxidante y protector

Su alto contenido en tocotrienoles de la vitamina E y los carotenoides de la vitamina A ayudan a contrarrestar los efectos de los radicales libres.

Asimismo, protegen tu pelo de la radiación solar, la contaminación y la climatología extrema que pueden debilitarlo.

Antimicrobiana

La mayoría de los compuestos que integran el karité brindan una acción antimicrobiana.

Es el caso de los ácidos grasos, las saponinas, los triterpenos y los tocoferoles que, además, refuerzan el sistema inmune aumentando la protección del cabello frente a agentes nocivos.

¿Para qué sirve la manteca de karité? 6 beneficios indispensables para tu pelo

La manteca de karité es un ingrediente versátil y eficaz para el cuidado del cabello gracias a las muchas propiedades que acabamos de compartir contigo.

Entre sus beneficios para el cabello destacan los siguientes:

Nutre el cabello fortaleciéndolo y reduciendo su caída.
Mejora la elasticidad de la fibra capilar y evita roturas.
Protege el cabello de las agresiones externas y de las fuentes de calor a la hora de peinarlo.
Ayuda a tratar problemas de dermatitis, eccemas y caspa, y alivia sus síntomas.
Evita el encrespamiento y ayuda a definir el cabello rizado.
Revitaliza el cabello dañado y combate su envejecimiento.

Manteca de karité para el pelo: cómo aplicarla

La manteca de karité es un producto magnífico para proteger, nutrir y recuperar el cabello dañado.

Te explicamos cómo puedes incorporarla en tus tratamientos según tu tipo de cabello.

Cabellos secos o dañados

Puedes utilizar la manteca de karité una o dos veces por semana como mascarilla intensa aplicándolo directamente desde la raíz a las puntas.

Si quieres potenciar el efecto antioxidante y añadir un extra de protección a tu melena, en Clearé Institute te recomendamos nuestra Crema Acondicionadora Antiedad.

Está enriquecida con extracto de baobab que rejuvenece la fibra capilar, y Ácido Glicólico AHA que proporciona una protección térmica frente al uso de secadores, planchas, etc.

Cabellos rizados y/o encrespados

En este caso puedes utilizar el karité como un acondicionador sin enjuague aplicando pequeñas cantidades sobre las puntas del cabello húmedo o seco.

Es una manera natural de controlar el encrespamiento y evitar la deshidratación del cabello con rizos.

Cabello con caspa

La manteca es un ingrediente que te ayuda a combatir la caspa por sus propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias. Además, su capacidad de hidratación te ayuda a evitar la sequedad del cuero cabelludo y la descamación.

Por estas razones, la hemos incluido en la formulación de la Mascarilla Anticaspa de Clearé Institute que reequilibra la hiperseborrea, refresca e hidrata en profundidad.

Cabello debilitado

El karité reestructura la queratina del cabello y lo llena de vida gracias a su contenido en ácidos grasos esenciales. Esto ayuda a fortalecer el pelo y evitar su caída.

Nuestro Bálsamo Acondicionador Fortaleza Anticaída incluye este ingrediente, además de extracto orgánico de guisante que estimula el crecimiento capilar.

María del Pino Navarro Veroz

Farmacéutica Licenciada por la Universidad de Alcalá de Henares, con más de 25 años de trayectoria profesional y de gran autoridad en el sector de la belleza saludable. Especialista en la conceptualización, investigación y desarrollo de productos en la industria dermofarmacéutica y nutricosmética para el cuidado y salud de la piel. Apasionada de la industria dermofarmacéutica, es miembro del Claustro de Profesores del Centro de Estudios Superiores de la Industria Farmacéutica (CESIF).