Champú sin sulfatos o con sulfatos ¿sabes cuál escoger?

Los champús sin sulfatos evitan la pérdida de aceites esenciales del cuero cabelludo, respetan la estructura capilar y reducen las irritaciones o reacciones alérgicas. 

En este artículo, vas a contar con los argumentos necesarios para poder saber cuándo te conviene utilizar champús con o sin sulfatos. 

¿Qué son los sulfatos en los champús y para qué se utilizan?

Los sulfatos en los champús son detergentes que limpian profunda e intensamente el cabello, manteniendo el cabello libre de células muertas, seborrea y productos que se adhieren a él como las siliconas. 

Pero, estas sustancias derivadas del ácido sulfúrico crean espuma en contacto con el agua y cuentan con un gran poder limpiador, que puede llegar a eliminar los aceites esenciales del cuero cabelludo, irritando el cabello. 

Los tipos de sulfatos más utilizados en cosmética capilar

Los sulfatos más utilizados en las formulaciones de champús son los siguientes: 

Sodium Laryl Sulfate (SLS). Posee un gran poder de limpieza y espumante por lo que puede ocasionar irritación y sequedad. No es recomendado en cueros cabelludos sensibles o con problemas cutáneos. 

Sodium laureth Sulfate (SLES). Este tipo de sulfato es algo menos irritante que el anterior gracias al éter de su fórmula. Aunque sigue siendo un detergente agresivo que puede resecar el cuero cabelludo y dejarlo más frágil.

Sodium Coco Sulfate (SCS). Es un tensioactivo más suave que el SLS y el SLES. Mientras que el SLS y el SLES se derivan del petróleo el SCS procede del aceite de coco y es común en productos con ingredientes naturales.

Cabe señalar que todos estos tipos de sulfatos son seguros y no son tóxicos, pero que según el tipo de cabello y la composición de los tratamientos en los que se integren, sí pueden originar problemas.  

¿Cómo afectan los sulfatos de los champús al cabello?

Dado que los sulfatos en los champús cumplen una función de limpieza, si esta es intensa, puede eliminar los aceites esenciales del cabello. Esto provoca que, con su uso continuado, aumente la sequedad del cuero cabelludo y lo exponga a irritaciones, dermatitis u otras dolencias. 

Asimismo, al quedar desprotegido, el pelo se altera con mayor facilidad, pierde elasticidad y se vuelve quebradizo. Sumado a esto, los sulfatos pueden penetrar en el folículo, debilitándolo y favoreciendo la caída del pelo. 

Por estas razones y en función del tipo de cabello, además de ser crucial que los sulfatos se combinen con ingredientes hidratantes, puede ser recomendable dejar de usarlos.

Sulfatos en el cabello

¿Cómo escoger entre champús con sulfatos o sin sulfatos?

Ahora que ya sabes qué son los sulfatos y cómo pueden afectar a tu cabello, vamos a compartir contigo argumentos para que sepas cuándo conviene utilizar champús con sulfatos o sin sulfatos. 

¿Cuándo usar champús con sulfatos?

Cuando hayas utilizado productos con siliconas, habituales en los tratamientos para facilitar el peinado y obtener una mayor definición, es importante realizar un lavado con un champú con sulfatos, capaz de eliminar su rastro. 

Piensa que las siliconas forman una película artificial sobre el cabello, responsable del brillo inmediato que proporcionan, que es difícil de eliminar. Por ello, al quedar aislado por esta capa, el cabello va perdiendo nutrientes e hidratación, no se puede oxigenar y se acaba estropeando. 

Si has optado por una formulación con sulfatos, es fundamental elegir las opciones más cuidadosas y suaves para tu cabello, como el Sodium Coco Sulfate (SCS) y sus derivados. Además, busca champús que combinen estos sulfatos con activos naturales ultrahidratantes y regeneradores, como aceites vegetales y extractos botánicos, que ayuden a contrarrestar cualquier posible efecto secante. También es recomendable que el producto cuente con certificaciones de cosmética natural, como ECOCERT, que avalen el uso de ingredientes naturales y sostenibles, asegurando que tu rutina capilar sea tanto eficaz como respetuosa con tu cabello y el medio ambiente.

¿Cuándo usar champús sin sulfatos?

El uso de champús sin sulfatos es aconsejable en cabellos secos, debilitados y fragilizados, sobre todo aquellos con el cuero cabelludo sensible o con problemas dermatológicos. 

Por este motivo, en Clearé Institute hemos elaborado un Champú Anticaspa sin sulfatos ni parabenos, con un 93,6 % de ingredientes naturales y agentes de limpieza ultrasuaves que, además de eliminar la caspa y evitar su reaparición, restaura la integridad del cuero cabelludo. Con extractos naturales de Apium gaveolens y leche de algodón proporciona confort al cabello y forma un escudo protector contra las agresiones externas.

Igualmente, si te tiñes el cabello utilizando este tipo de champús vas a lograr conservar por más tiempo el color. Esto se explica porque los sulfatos arrastran el tinte más rápido.  

Champú Anticaspa de Clearé

Otro tipo de cabello que debe evitar los sulfatos es el cabello rizado o afro. Se sienten más secos que los cabellos lisos ya que su fibra es más irregular y necesitan más tiempo para que los aceites naturales del cuero cabelludo desciendan a lo largo de toda la fibra y la hidraten.

Además, apelmazan el rizo originando el temido frizz o encrespamiento. Por este motivo tu mejor opción son los champús sin sulfatos que limpian suavemente el cabello, aportando un rizo definido, suave y brillante como el Champú Low Poo Curly de Clearé Institute. Formulado con extractos de semillas de Amaranto e hidrolizado de proteínas de quinoa y trigo cuida tu cabello respetando la función barrera.

Si te preocupa el nivel de limpieza de las formulaciones de champús sin sulfatos, no tienes por qué hacerlo. Los sustituyen por tensoactivos que limpian el pelo, pero son mucho más suaves y no provocan problemas como pueden ser los glucósidos o las betaínas.

Champú Low Poo Curly de Clearé

Ventajas de los champús sin sulfatos ni parabenos

Las ventajas de los champús sin sulfatos ni parabenos son muchas. 

Como hemos visto, evitan irritaciones, alergias y otras reacciones en el cuero cabelludo, ayudan a reforzar el cabello, mantienen la humedad, prolongan el color de las coloraciones y favorece la producción natural de aceites hidratantes.

Su cuidada formulación repara y rejuvenece el cabello al instante, además de proporcionarle una protección térmica eficaz gracias al ácido glicólico que contiene. 

Farmacéutica Licenciada por la Universidad de Alcalá de Henares, con más de 25 años de trayectoria profesional y de gran autoridad en el sector de la belleza saludable. Especialista en la conceptualización, investigación y desarrollo de productos en la industria dermofarmacéutica y nutricosmética para el cuidado y salud de la piel. Apasionada de la industria dermofarmacéutica, es miembro del Claustro de Profesores del Centro de Estudios Superiores de la Industria Farmacéutica (CESIF).